Tras poder utilizar la GPWIZ y la DINGOO de una manera más o menos extensa, me gustaría explicar de manera breve qué me parecen la una en comparación con la otra, por aclarar las ventajas e inconvenientes que nos ofrecen. Se ha escrito bastante al respecto aunque parece que alguna vez de manera un tanto interesada. Vi hace poco una videoreview decantándose por la Dingoo que me pareció cercana a la demencia. Conviene centrar el asunto un poco.
La Dingoo (fabricación china) y la GPWIZ (GamePark, coreana) compiten en el mismo sector: el de las consolas que están destinadas sobre todo al mundo del homebrew o software de desarrollo libre. Esto incluye ports de juegos de otros sistemas, y sobre todo emulación, además de facilitar escuchar música, ver videos, etc. Por tanto, su oferta de “servicios” es similar, si bien con logros diferentes.
- LA PANTALLA: sus dimensiones y resolución son idénticas. Ahora bien, el sistema es radicalmente distinto: mientras la Dingoo nos presenta una pantalla LCD la WIZ cuenta con una OLED táctil. La impresión de cara al usuario, y expuesto de manera franca, es que la LCD de la Dingoo se muestra un tanto apagada aunque con excelente nitidez (un gusto, la verdad), y poco visible en exteriores (la propia de este tipo de pantallas). En cuanto giremos algo la pantalla perderemos contraste de manera notable aunque no debe preocuparnos porque en portátiles se controla mucho la postura al jugar. Mejor en todo caso a mi juicio que la GP2X, lo cual es mucho decir. La WIZ sorprende por el tipo de pantalla, una OLED muy luminosa y de excelente contraste, que no pierde cualidades al alterar el ángulo de visionado. Además es táctil, pero para ser franco rara vez usaremos esta prestación salvo quizá en la emulación Scumm en la que se muestra MUY operativa (es un placer jugar con el puntero). Sin embargo no todo es bueno: presenta irregularidades ante igual tono en los diferentes pixeles (por el tipo de pantalla), efecto que no molesta pero que se nota, y tiende a memorizar imágenes por lo que se recomienda no dejar fija una escena mucho tiempo. Leo muchos comentarios alabando la pantalla de la WIZ: conviene aclararlo todo, no es tan perfecta como uno imaginaría a tenor de lo que se dice. En líneas generales preferiremos claramente la pantalla de la WIZ pero echando de menos un mayor tamaño (y esto, no sé por qué, ocurre más en la WIZ que en la Dingoo).
- EL DISEÑO: Los chinos, como buenos imitadores, han copiado el estilo Apple-Nintendo en la Dingoo, mientras la WIZ tiene un diseño bastante vulgar y anodino. Sorprende esto último ya que las GP2X (antecesoras de la WII) no eran precisamente feas. La Dingoo sin duda es más bonita, y a las imágenes me remito. El tamaño de ambas es perfecto, muy portátiles, semejante al concepto de Gameboy Micro y mejor opción que utilizar para emulación la más aparatosa PSP. Por cierto, la conexión de auriculares en la Dingoo está en una posición desafortunada: si no tenéis una conexión en L puede molestaros para jugar.
- MEMORIA: Doble de RAM para WIZ (64 Mg) y cuádruple memoria flash integrada en Dingoo (4 gigas frente a 1 de WIZ, y os aseguro que os resultará muy útil). Aparte de esto, ambas tienen soporte para tarjetas SD así que ningún problema al respecto. Ah, la Dingoo usa MINI SD (no MICRO SD) por lo que ojo con el formato, bastante menos habitual el de la consola china que el de la coreana.
- LAS MARCAS: La coreana Gamepark tiene una experiencia contrastada en el diseño de consolas por lo que esto les avala. Sin embargo da la sensación de abaratamiento de costes en la fabricación y concepción de esta consola: plástico, muy ligera, poca calidad frente a otros antiguos modelos más afortunados. Sin embargo las WIZ apenas dan problemas y su fabricación es fiable. La Dingoo proviene del mercado chino y existen bastantes modelos y variantes. Las primeras parece ser que son de mayor calidad pero a éstas siguieron otras que son denominadas “no Paw” (sin el logo de la Dingoo, la huella de animal, en la parte trasera) y “HK” (con estas siglas en el número de serie) de fabricación ultrabarata. Éstas mejoran algún aspecto (como la cruceta) pero tienen una calidad de materiales menor y ofrecen problemas múltiples de compatibilidad con software que sí funciona en las primeras Dingoo. Incluso dentro de éstas, teóricamente las mejores, hay emuladores como el de NeoGeo que funcionan sin problemas en unas y en otras presentan problemas de pixelados en zooms en función de elementos de hardware desconocidos. Por tanto, menos fiabilidad general y problemas varios en la Dingoo.
- PROCESADOR: La Dingoo permite ejecutar aplicaciones a una tasa de aproximadamente 400 MHz mientras que la WIZ llega de manera estable a los 800. Poco más hay que añadir, salvo la aclaración de que 400 MHz permite emular casi cualquier sistema perfectamente, con tan sólo problemas de ralentización en SNES y Gameboy Advance, algo que no ocurre en WIZ con una emulación perfecta. Los 800 MHz de WIZ, no obstante, sólo se ven aprovechados en escasas ocasiones como los port de Quake o Doom, aunque para éste ya bastaban los modestos 166 MHz de la GP32.
- PRESTACIONES GENERALES: Gracias al trabajo desinteresado de mucha gente, ambas consolas cuentan con gran cantidad de emuladores que funcionan muy bien. Las dos consolas son auténticos centros multimedia: música mp3, video compatible DivX sin necesidad de convertir el video previamente, reproductores flash para aplicaciones o juegos, … La Dingoo sin embargo ofrece dos cosas que la WIZ no tiene: un servicio de radio que funciona bastante bien, y la salida de TV, la gran baza de esta consola. Esto permite visualizar en nuestra gigantesca tele del salón desde videos (con una calidad no obstante limitada, aunque funciona bien), y jugar con emuladores de antiguas consolas a todo “tren”. La calidad de imagen obtenida es buena y realmente merece la pena. La pega: sólo funciona con los llamados “emuladores nativos” (que no son muchos) y no bajo Dingux, un sucedáneo de Linux para la Dingoo con el que podemos explotar realmente el potencial de la consola. Recientemente se ha ofrecido alguna solución a este asunto, aunque farragosa y no exenta de problemas.
- MENUS: El menú de la GPWIZ no es el mejor del mundo pero no ofrece tampoco grandes problemas, podremos navegar cómodamente por él, y por cierto rara vez usaremos la función táctil de la pantalla. Se puede customizar con múltiples “skins”. El de Dingoo es directamente una copia del de PSP por lo que poco más hay que decir. La Dingoo no obstante permite la instalación del mencionado Dingux, que no es difícil pero sí algo molesta. Además para la creación de iconos o accesos directos debemos toquetear los archivos de inicio por lo que instalar aplicaciones o emuladores llevan una dificultad añadida. En la WIZ, en este sentido, todo es más sencillo: arrastrar y utilizar, sin más pegas.
- BOTONES: A pesar de la extraña forma de doble cruceta, la WIX cuenta con botones cómodos de utilizar, con diagonales no tan difíciles de ejecutar por ejemplo como en la maldita PSP 1000. No son botones maravillosos ni de una calidad excesiva pero sí prácticos una vez nos acostumbramos, y de tacto “blando”. La Dingoo es algo más dura y la cruceta exige un mayor esfuerzo, aunque sin ser excesivamente problemática, la prefiero a la mala cruceta de la Nintendo DS. Sin embargo la Dingoo nos reserva un regalo: no hay botones específicos de volumen. Así, en las aplicaciones multimedia se controla con la cruceta, pero para emuladores es incomodísimo. Ahorro de “coste” a “costa” de algo tan elemental (en emuladores cambiamos el volumen a través del menú, sin comentarios). Los botones L y R superiores: los de la GP no son especialmente cómodos, pero los de Dingoo son cercanos a la inoperatividad, aunque rara vez los usaremos: ni la GBA ni la SNES son el fuerte de la consola.
- PRECIO: WIZ conseguible a unos 115 euros. Dingoo a unos 65. Cuestión de economías, no indagaré más: leed todo el artículo y la decisión es vuestra. Sí os diré que Dingoo es una excelente máquina para su precio casi ridículo, mientras que por poco más de 100 euros WIZ os ofrecerá las puertas del paraíso de la emulación. Decisión vuestra.
- ¡EMULADORES AL PODER!: El gran atractivo de ambas consolas. El concepto es distinto en WIZ que en Dingoo. En WIZ tenemos una aplicación que ejecutamos, y después tendremos que navegar por directorios en busca de las ROMS. En el sistema nativo de Dingoo copiaremos el emulador en la raíz y las ROMS en una carpeta. Lo que se ejecuta aquí es la ROM (por cierto, leeento sistema de navegación con carpetas repletas de cientos de roms, dividid en subcarpetas!!!) , y la consola busca el emulador adecuado. Conviene aclarar que la WIZ emula a fullspeed prácticamente todo menos PSONE, pero cuenta con demasiados ports de emuladores de GP2X y poca optimización específica. En realidad da igual dado que todos funcionan perfectamente y sin problemas de velocidad, pero se echa de menos un mayor aprovechamiento de tanta potencia. En la Dingoo podréis contar también con emuladores que van desde todos los sistemas clásicos de 8 bits hasta los de 16 incluyendo SNES, Amiga, Atari ST… En estos últimos la Dingoo se muestra menos potente. Por otro lado, las recreativas: el MAME, CPS1, CPS2, todo ello perfectamente emulado. Cada una de las consolas y emuladores tiene puntuales incompatibilidades o problemas, lo cual es típico y lógico en cualquier sistema y software. Aparte están aplicaciones como Scumm y sus aventuras clásicas de Lucas: imprescindible. Las menciones a Dingux, que permite utilizar más emuladores con mayor optimización, ya han sido hechas por lo que conviene tomar nota no obstante de esta cualidad-complicación añadida que por otro lado luego redunda en ventajas y más prestaciones. No deja de ser una consola que admite una forma peculiar de Linux, así que a los que os guste trastear, aquí tenéis un entretenimiento extra. Si queréis sencillez, la WIZ es más apropiada. Y sinceramente, en este tipo de consolas en las que cada emulador es un mundo, no veo necesidad de que nos compliquemos más.
Existen más cosas de las que hablar, como los ports de otros juegos para estas consolas o juegos propios (muy muy pocos), pero no quisiera extenderme demasiado. Os he querido dar una explicación sincera y llana sobre ambos aparatos para que veáis los pros y los contras. Sinceramente, cuando una consola da el doble por el doble de dinero, la elección es puramente subjetiva. Creo que es mejor consola a todas luces la WIZ, pero la Dingoo ofrece una atractiva propuesta a un precio competitivo sin descuidar ciertos aspectos estéticos y de prestaciones. Por mucho que leáis otras cosas en comparativas de otros medios, os aseguro que la realidad es la que os he expuesto en estas líneas. Y frente a estas opciones está una tercera no comentada: una PSP2000 “customizada” que con sus modestos 233 MHz nos ofrecerá incluso emulación de PSONE perfecta, con una enorme pantalla y por un precio probablemente mayor pero no mucho. Sólo veremos sacrificada la portabilidad, pero la consola de Sony sigue siendo sorprendente aunque a costa de “tuneos” poco del agrado del fabricante.